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Cuando pensamos en una propuesta de valor, en ocasiones nos confundimos y pensamos en el producto o en el servicio, pero no es así. La propuesta de valor va más allá de eso, la propuesta de valor se enfoca en lograr que la marca tenga un corazón, que tenga espíritu. 

La propuesta de valor no necesariamente es el producto, en ocasiones es un concepto intangible que representa la marca, como por ejemplo la propuesta de valor de tesla es “Acelerar la transición mundial hacia una energía sostenible”. Esta propuesta de valor es tan fuerte que sus consumidores defienden el producto a pesar de los problemas que ha tenido la marca. 

Contar con una propuesta de valor sólida y clara no solamente te ayudará a vender productos o servicios, sino que te permitirá generar una comunidad que no solamente te comprará, sino que estará dispuesta a defenderte porque comparten valores, a donde tu marca quiere ir es donde ellos quieren ir.

¿Qué es la propuesta de valor?

La propuesta de valor es el espíritu o corazón de tu negocio, es en el cual se recopilan todos los enfoques, deseos y objetivos de la empresa; donde se explica claramente el producto o servicio y cómo resuelve los problemas, los beneficios específicos que se otorga y por qué deberían elegirte, es  una forma de mostrar el valor único que aporta.

¿Para qué sirve una propuesta de valor?

Contar con la propuesta de valor te da muchos beneficios como negocio, entre los cuales permite al cliente identificar claramente cuales son las necesidades específicas que cubres, esto te permitirá ser más claro en tus mensajes y en tu producto. 

¿Cómo creo mi propuesta de valor?

Para crear una propuesta de valor puedes usar una herramienta, así como el business model canvas, esta herramienta te ayudará a tener claridad de la propuesta de valor. 

Crear una propuesta de valor poderosa para tu negocio puede parecer difícil, pero no es imposible. Es importante que consideres todos los puntos

Proceso para crear tu propuesta de valor

1. Identifica el problema que resuelve tu producto: Antes de definir una solución, debes comprender el problema. Este problema debe surgir de las frustraciones de tus clientes. Si no hay frustración del cliente, no hay problema que resolver. Sin un problema no hay solución y sin solución no hay producto. Es así de simple.

2. Define tu público objetivo: El público objetivo se refiere al grupo específico de personas que tienen más probabilidades de necesitar tu producto. Este grupo puede variar según intereses, género, ubicación, edad e incluso ingresos.

3. Diferénciate de la competencia: La propuesta de valor juega un papel crucial aquí. Es esencial conocer a tus competidores a fondo para entender qué te hace único.

Una vez que puedas responder estas tres preguntas, estarás listo para crear tu Value Proposition Canvas siguiendo el esquema adecuado.

Puedes usar el canvas de propuesta de valor 

Este canvas te dará un norte y te permitirá solucionar de mejor manera tu propuesta de valor, ¿Tu ya conoces con claridad tu propuesta de valor?

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